Las máquinas cada vez están más involucradas en nuestras actividades, realizando tareas en las que antes no las imaginábamos. Es ahora a una máquina a quien le pagamos el servicio del parqueadero, le compramos el pasaje de transmilenio, o aspira la casa mientras salimos.
La situación en la que máquinas realizan trabajos del hombre no es nueva, o cuántos empleos no desaparecieron con la llegada de estas a las ensambladoras de autos, por citar sólo un ejemplo. En este escenario ¿Podríamos llegar a pensar que cualquier trabajo es susceptible de ser automatizado? ¿Su trabajo actual sería automatizable?
Los investigadores del MIT Erik Brynjolfsson y Andrew McAfee, en su libro La carrera contra las máquinas, mencionan: “Es urgente que entendamos este fenómeno, discutamos sus implicaciones y presentemos estrategias que permitan a los trabajadores humanos avanzar con las máquinas en vez de competir contra ellas”. La revolución tecnológica no se detendrá y cada vez más la robótica llegará a desempeñar nuestras labores, así que evolucionar y desarrollar nuevas habilidades al mismo ritmo que lo hacen las tecnologías, es clave.
Harm Bandholz, jefe economista del Grupo UniCredit y bloguero del Banco Mundial, sostiene que para hacerle frente a esta situación es necesario iniciar por transformaciones en el sistema educativo, “dado que los robots y las máquinas son capaces de hacerse cargo de un número cada vez mayor de tareas, los seres humanos tienen que centrarse en sus ventajas comparativas, que incluyen las habilidades no cognitivas”
Así mismo, el Banco Mundial asegura que en el proceso educativo es vital el desarrollo de nuevas habilidades que minimicen el impacto de las máquinas en el trabajo de la personas. “Hay pruebas claras de que las aptitudes de comportamiento –como el trabajo en equipo, la diligencia, la creatividad, el espíritu empresarial– son esenciales para prosperar en las actuales economías globalizadas en rápida evolución e impulsadas por la tecnología” afirma Harry A. Patrinos, Gerente del sector educación del Banco.
La tecnología ha traído grandes beneficios para la humanidad y lo seguirá haciendo, por ejemplo supliendo a los humanos en el desarrollo de labores de alto riesgo, pero debemos prepararnos y desarrollar competencias, tanto digitales como blandas, para no quedar desempleados por culpa de un robot, más aún cuando la Federación Internacional de Robótica (IFR) pronostica en su informe mundial de 2016, que para el 2018 llegarán a las fábricas e industrias del mundo, 2,3 millones de robots.
Desarrolla tus competencias y prepárate para el futuro laboral.
Nosotros te ayudamos en el proceso
Conoce +Teletrabajo para todos
Fuente: Banco Mundial